Quiero crear un nuevo día,
un día de luz diáfana y opuesta
a la luz de las farolas,
un día falso pero hermoso,
existente sólo para mí
-o
para todos-,
pero un día que pueda tocar,
que tenga viento,
vértigo,
y nubes, y vida,
y recuerdos y labios de carmín,
un día irreal pero mío,
un día en el que tú aparezcas subiendo las escaleras de la Facultad,
o en que en la calle me cruce tu sonrisa,
un día que no haya existido aún
-entonces no existirá si no lo creo-,
un día sin palomas que se arrastren bajo el cielo,
sin semáforos en rojo,
sin miedos al fracaso de la noche,
sin palabras atragantadas entre miradas
huidizas
y sonrisas
de cristal bohemio,
un día en que la prisa del alcohol
no evoque las distancias entre los
puentes
de hierro y
las dehesas secas bajo
un
sol
carnívoro y sin sombras,
un día con su noche
de estrellas -apagadas
o encendidas,
¿qué más da?- y
su luna inmóvil y fría,
rubia, escondida entre
montañas de verdes rutas de soledad.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarQué mejor manera para expresar los sentimientos que con su lenguaje,la poesía.
ResponderEliminarEs preciosa,y sólo puedo decirte que tú puedes hacer que tus días sean especiales,tú puedes crear algo nuevo y mágico cada día con esa persona de sonrisa perenne,aún en el caso de que esos anhelados encuentros se produzcan esporádica y efímeramente.
Suerte,"mini Dios a pequeña escala";)
Un beso!
PD:Muchas gracias por haber pasado por mi blog(y lo que es más,haber leído.¡Mereces un premio!)
Pasate cada vez que quieras.
Yo también me pasaré de vez en cuando por aqui:)